¿Qué pasa con la mucosidad?
Senos paranasales y congestión
Todo el mundo tiene mucosidad, pero cuando estás resfriado, sientes que tienes demasiada mucosidad.
Aunque puede parecer desagradable, la mucosidad es parte de la primera línea de defensa importante del cuerpo contra las cosas que pueden causar problemas. La mucosidad es una secreción viscosa producida por las membranas mucosas en el tracto respiratorio (así como en diferentes áreas del cuerpo).
El propósito de la mucosidad en la nariz y los senos paranasales es atrapar partículas diminutas que, de otro modo, serían succionadas hacia los pulmones. Los objetos extraños como el polvo, los contaminantes y los alérgenos pueden causar problemas si llegan a los pulmones.
La mucosidad también ayuda a hidratar el aire inhalado. Esto permite que los pulmones funcionen de manera más eficiente y evita que los tejidos nasales y de los senos paranasales se resequen, lo que dificultaría la lucha contra los gérmenes. La mucosidad también es útil porque contiene anticuerpos para ayudar a tu cuerpo a reconocer bacterias y virus y células que secretan enzimas con el fin de matar a estos invasores.